Qué gusto da darle un soplo de aire fresco a tu hogar, tener una habitación limpia y lista para la nueva temporada. Te proponemos una lista TO DO para que tu casa brille y no se te escape nada.

Paso 1: Empezamos por el salón.

Pon música alegre y motivadora, ¡y manos a la obra! El salón es la estancia principal de la casa, donde pasamos la mayor parte del tiempo, así que encabeza nuestra lista de tareas. Abre las ventanas para ventilar bien. Mientras pasas la aspiradora por el suelo, debajo y detrás de los muebles y sofás, las fundas, cojines, mantas y cortinas ya están dando vueltas en la lavadora. Es el momento ideal para reorganizar el espacio: un poco de cambio siempre sienta bien. Limpiamos el polvo de los muebles de madera maciza con un paño ligeramente húmedo: aparador, cómoda, mueble de TV, mesa de centro, mesa de comedor… ¡todo incluido! Optimizar el almacenamiento es clave: reorganiza tu librería o tu vajillero. ¡El salón, listo!

Paso 2: Un dormitorio sano y acogedor.

Nueva habitación, nueva playlist (pero igual de animada). El dormitorio es EL lugar donde debes sentirte como en un nido acogedor. Empieza por hacer la cama y cambiar las sábanas si hace falta. ¡Vamos allá! Hora de ordenar armarios, cómodas y mesitas de noche. Vacía cajones, haz limpieza y organiza. Y sí… ha llegado el momento de hacer limpieza en el armario. No es fácil despedirse de esos pantalones tan bonitos que ya no nos quedan, pero guardarlos eternamente no es la solución. Clasifica y dona a asociaciones o deposítalos en un punto de recogida para que puedan ser reciclados. Lava edredones, fundas de almohadas y limpia el colchón: ¡esencial para un descanso saludable! ¿Lo sientes? Esa sensación de paz cuando te metes en la cama en una habitación ordenada, con sábanas suaves y limpias. Buenas noches... ¡Ah, no! ¡Aún no hemos terminado!

Paso 3: Limpieza ecológica en el baño.

Prepara tus esponjas ecológicas para dejar el baño reluciente. Consejo de la abuela: empapa tu esponja con piedra de arcilla blanca, vinagre blanco o bicarbonato y frota con energía las juntas de los azulejos. ¡Qué suerte! Justo empieza a sonar “Eye of the Tiger” de Survivor. No te olvides de desincrustar los grifos, limpiar la alcachofa de la ducha y revisar la lavadora. Lava también las cortinas de ducha y las alfombrillas. ¿No tienes suficiente espacio para guardar medicinas, maquillaje o toallas? Apuesta por un mueble bajo lavabo más grande o añade una columna de baño. ¡Todo limpio!

Último paso: La entrada.

Última estancia, pero no menos importante: la entrada es lo primero que ven tú y tus invitados al llegar, el sitio donde nos vestimos, desvestimos… ¡No la descuides! Organiza este espacio con los muebles adecuados: espejo, banco, consola… Piensa en la funcionalidad y la practicidad para hacerte la vida más fácil. Y a limpiar: quita el polvo de la lámpara, limpia rodapiés, espejos, interruptores y alfombrillas.

A estas alturas seguramente estás agotado… ¡pero feliz! Vas a poder disfrutar de tu salón, de cada estancia de tu hogar, y sentirte bien en cada rincón. ¡Reto superado, TO DO completada!